Ese misterioso lugar

Hubo diferentes definiciones de lo que es el Akasha a lo largo de la historia de la humanidad, hoy nos enfocaremos en la funcionalidad actual. Lejos quedó la época en que el akasha era dominio de grandes iniciados y ocultistas, actualmente hasta puedes iniciarte en un breve curso de pocas horas.

 

Para quienes quieran imaginar, pueden visualizar el akasha como una gigantesca biblioteca cósmica que contiene récord y memoria de todo lo pasado, presente y futuro, incluyendo los pensamientos y los potenciales no manifestados. 

 

Actualmente es necesario que nos conectemos con la parte akáshica de nuestro mundo, pues allí está la sabiduría de los maestros, de los seres de luz y de nuestra alma. Ese mundillo invisible que tan amorosamente se nos presenta tiene la particularidad de sanar. Cada vez que un ser humano solicita la apertura de su registro akáshico recibe sanación kármica para su presente, su pasado y su futuro, pues en el akasha no existe el tiempo lineal. Por la simple humildad de pedir consejo y guía se nos bendice con liberación y transmutación del karma.  Bien entendido, el karma es todo aquello que nos trae la vida para aprender, hasta ahora el aprendizaje suele venir acompañado de sacrificio y de nosotros depende aprender sin dolor, con alegría y paz. Las sesiones akáshicas son un excelente experiencia de aprendizaje amoroso, pues son muy armoniosas, profundas, alegremente emotivas, pacificadoras y suelen ser el punto de inflexión en la vida de muchos.

 

Durante la sesión akáshica puede suceder que se haga presente un maestro espiritual de quien es leído y es hermoso notar con qué familiaridad se dan los mensajes. Generalmente sucede lo que llamo "el guiño", pues los maestros y guías suelen mostrarle al consultante que los mensajes son verdaderos haciendo que el lector diga algo muy personal del consultante, pero que el lector no tiene manera de saber, muchas veces se dicen cosas que sólo quien consulta sabe, cosas que jamás le ha contado a otro. Cuando el lector pone en palabras estos hechos tan íntimos, el consultante no tiene margen para dudar de la veracidad de los mensajes. 

 

Podemos ser conscientes de la multidimensionalidad a través del contacto con el akasha.

 

Es importante destacar que los mensajes recibidos en sesión son meras sugerencias, pues el libre albedrío es lo que importa. Estamos en épocas de maestría, cada uno es llamado a convertirse en un maestro de su propia vida, utilizar el libre albedrío es fundamental, solamente tomando decisiones desde un corazón puro es como podremos alcanzar algún grado de maestría sobre la faz de éste planeta. Acumular conocimientos, títulos y reconocimientos, no es lo que importa para la evolución; es mucho más importante develar la propia esencia, abrazar nuestra sombra y ser auténticos ante cada suceso de la vida. 

 

El registro akáshico se presenta como ese lugar donde podremos encontrar el "hilo de Ariadna" para llegar al núcleo de nuestra mente+corazón y a partir de allí, movernos.

Guada

 

Madre, artista plástica, terapeuta integral y maga

Maestra en Sanación y Símbolos Arcturianos, Practitioner de Flores de Bach, Canalizadora en Sanación Metamórfica, Lectora del campo cuántico, Lectora y Maestra en Registros Akáshicos, Traductora de Luz (Canalizaciones de Seres Divinos), Munay Ki, eterna estudiante del Sincronario Maya de 13 Lunas, Instructora de Mantras, Geometría Sagrada, Aqualead y Alquimia. Cocreadora del Taller "Desde el Útero".